#ENTREVISTA Nada que celebrar este 10 de mayo para madres de desaparecidos

Las cifras de desaparecidos en México son altísimas, lo que se traduce a una cifra similar de madres buscándolos, madres que de un día a otro perdieron una parte de su vida y ahora, además de seguir con su vida, cargan con el pesar de no saber qué es de sus hijos, dónde y cómo están.
En el marco del Día de las Madres, Oliva Noticias Córdoba recuerda que no para todas las madres este 10 de mayo es una celebración:
Doña Maricruz Ojeda Sastré busca a su hijo Tomás Rayón Ojeda, una chica trans que se hizo nombrar Betza Ojeda, quien desapareció el 9 de octubre. A 7 meses sin ella, la madre no piensa celebrar el 10 de mayo, pues hay un vacío en su casa: su hija.
Doña Rosa María Fernández busca a su hijo, Bernardo Ramos Fernández, de 33 años, quien desapareció el 7 de octubre de 2022. Este 10 de mayo para ella será un día normal, un día de trabajo, en lo que encuentra un escape a su dolor de extrañar y buscar a su hijo.
Ambas madres comparten el dolor de tener a sus hijos desaparecidos, quienes eran amigos y desaparecieron con dos días de diferencia. Las circunstancias las han unido para investigar su desaparición; sin embargo no saben por qué razones pudieron haberse ido o alguien tuviera intensiones de desaparecerlos.
«Nadie nos dice nada, no hay noticias de nada».
Con los ojos aguados, ambas madres coinciden en que aunque su vida sigue, este 10 de mayo es otro día de fe y esperanza en que por fin tendrán noticias de sus hijos.
«Ves llegar el anochecer y te vas con esa esperanza de que te hable o de que al menos te diga ´madre, estoy aquí, no te preocupes por mí´… pero eso no es así», dice con voz quebrada doña Rosa.
«Sigo esperándola hasta encontrarla, pero no solamente a mi hija, encontrar a todas las que se tienen que encontrar», agrega doña Maricruz, quien destaca que desde el Colectivo Madres Luna se respaldan y dan ánimos para continuar la búsqueda.
«Yo ya sentía algo antes de que ella desapareciera, como un presentimiento… yo le dije a ella cuídate, no te vaya a pasar algo».
Ambas madres relatan que la Fiscalía Regional las apoya con atención psicológica, legal y canasta básica, así como viáticos cuando salen a campo en busca de señas de sus familiares.
«El trabajo es la mejor medicina que tengo, es un distractor, te mantiene de pie, te mantiene firme y no te estás acabando, pero todo el día tu hijo está contigo, aunque no esté aquí, pero ahí está contigo en el pensamiento, en el corazón… Hoy no se celebra nada».
Finalmente, las madres de Betza Ojeda y Bernardo Ramos hicieron un llamado a la sociedad para no tachar a los desaparecidos de haber andado en malos casos y no alejarse de ellas ni ignorarlas, pues «no es fácil lidiar con todo esto… nosotros lo único que queremos es que un día no muy lejano nuestros hijos aparezcan».